Sinceramente...
Realmente no sé si tengo algo que decir. Quizá si tenga, pero he olvidado la manera en que las palabras suenan mejor, en que las imágenes se ven mejor; por ahora a lo único que me dedico es a mostrar lo que mis ojos ven y no porque sea cómodo sino porque me gusta recordar los instantes, cuando veo de nuevo las cosas, los paisajes, las personas, recuerdo todo lo que ellos implican, no sólo en ese momento sino siempre. Cuando escribo es diferente, por que los sentimientos van más allá, se clavan en las líneas y dejan asomar más de lo que soy, las letras dejan de ser palabras y los poemas dejan de ser míos para convertirse en de quien los lee; es entonces cuando dudo de ellos y de mi, en especial de mi, porque las cosas que escribo no son para los demás, son porque hay algo tan grande que no puedo seguir guardándolo en el corazón, por que hay un alma que posee este cuerpo y usa estas manos, lo hago no porque quiera que alguien me lea, en realidad quisiera que nadie lo hiciera... escribo porque quiero dejar de ser quien escribe, para convertirme en quien siempre he deseado ser...
0 Comments:
Publicar un comentario
<< Home